A una semana de la entrada en vigencia del acuerdo con siete grandes cadenas de supermercados, entre ellas La Cooperativa Obrera de Bahía Blanca, un relevamiento detectó faltantes en productos de la canasta básica real y una variación de precios del orden del 30% según el punto de venta. El informe, realizado por el Instituto de Estudio de Consumo Masivo en bocas de proximidad a las grandes superficies y en los propios hipermercados, encontró «fallas muy graves» y similares a las observadas en el anterior acuerdo que rigió desde febrero. Miguel Calvete, presidente del Instituto confirmó que de los 500 productos incluidos en los listados, sólo 40 son de la canasta básica elemental y de esos bienes hay un desabastecimiento muy importante en todas las participantes del acuerdo. En cambio, el relevamiento realizado por INDECOM, destaca un sobrestock de productos de menor rotación como tintura de pelo, cepillos de dientes, etc, como explica Calvete en este audio. Para el referente de la Federación de Supermercados y Asociaciones Chinas de la Argentina “los responsables directos de esta situación son las grandes cadenas de supermercados en connivencia con las industrias más importantes” y agregó que con este acuerdo propuesto al gobierno nacional «se están burlando de los consumidores porque no se han puesto en la lista productos en su escala real de consumo” como puede escucharse aquí. Agregó que si bien todos los productos integrados al acuerdo son de consumo masivo, los verdaderos ítems que pertenecen a la canasta básica real son aquellos que rotan tres veces a la semana en la mesa de una familia y no aquéllos que pueden utilizarse una o dos veces al mes. Sin embargo, estos últimos son los que abundan en las listas del congelamiento acordado con el Ejecutivo Nacional.
Además, el directivo explicó que es falso el número de 500 productos acordados. «Si se toma en cuenta la repetición de productos de diferentes marcas y se desagregan de la lista, se ve que hay muchísimos ítems que no muestran la variedad real que debe haber en esos elementos”. Para Calvete, el Gobierno no es responsable directo de esta situación porque esto ha sido idea de las grandes cadenas de hipermercados pero reconoce que desde la Secretaria de Comercio Interior debería trabajarse para corregir la nomina de estos productos incorporando aquéllos que realmente sean de consumo masivo.
En otro sentido el representante supermercadista dio datos contundentes sobre el incumplimiento del congelamiento de precios propiamente dicho y afirmó que “según INDECOM, hay una variación de aproximadamente el 30 % entre los mismos productos en las diferentes cadenas” y afirmó que “lo que esta barato en una está más caro en otra” con lo cual un consumidor para hacer una compra adecuada debería recorrer cinco supermercados distintos, constituyendo esto también un engaño para la gente”.
Finalmente, Calvete le solicitó al Gobierno Nacional que intervenga inmediatamente para regular esta iniciativa que han delineado las grandes superficies de ventas y que hasta el momento no hace más que confundir y perjudicar a los consumidores.
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