(Notas de Usuarios) – Las últimas declaraciones del Secretario de Salud, Diego Palomo, resultan por demás inquietantes para quienes trabajamos diariamente en el sistema sanitario de la ciudad de Bahía Blanca. Atrás parecen quedar las definiciones sobre lo social en el campo de la salud y otros conceptos con los cuales difícilmente podríamos estar en desacuerdo, para comenzar a hablar de «mercado de la salud». ¿De qué mercado nos habla el funcionario? ¿Vamos a dejar de prestar un servicio, de garantizar el acceso a la atención para venderle un producto de salud a los/as bahienses? ¿Dejaremos que nuestras prestaciones se guíen por la ley de oferta y demanda que tanto daño ha hecho desde las políticas estatales a nuestro pueblo? No hablamos de un simple error. Definir que el campo de la salud no es en realidad más que un mercado no puede sino llevarnos a someter a esa lógica a todas las decisiones del área.
Supongamos que cualquiera de nosotros/as tiene la responsabilidad de tomar decisiones fundamentales para nuestro sistema de salud. Nuestra preocupación sería lograr la mayor accesibilidad a los servicios de salud en todos sus niveles con el personal idóneo y los recursos necesarios, que la población y los/as trabajadores/as de esos servicios estén satisfechas/os con el resultado de los mismos, y que esto se exprese en mejores resultados en la salud de la población.Ahora, cambiemos la perspectiva y ubiquémonos en el «mercado de la salud». En ese caso, como cualquier empresa, intentaremos tener menores costos, aportar menos capital para obtener mayores ganancias. Esta lógica desde el Estado implicaría una menor inversión que mantenga un sistema que, aun en crisis, pueda seguir funcionando a pesar de la resistencia de la comunidad y las/os trabajadoras/os. Mientras tanto, el secretario de Salud propone fortalecer las unidades sanitarias a través de equipos básicos de trabajo para optimizar la atención en cada barrio. Si bien apoyamos esta política, la realidad indica que el proyecto existe en 7 de las 55 unidades sanitarias de nuestra ciudad y deja muchas dudas acerca de la función de los/as otros/as profesionales que ya trabajan en ese nivel.
El sistema sanitario bahiense está integrado por las Unidades Sanitarias, el Hospital Municipal, los centros intermedios de White y Cerri, al cual se le suma el Hospital Penna desde la órbita provincial.
No puede pensarse que desde un solo nivel de atención automáticamente se mejorará la atención general.
Es decir, aunque las unidades sanitarias estuvieran en óptimas condiciones (que no son las actuales), la población seguiría requiriendo de los servicios hospitalarios: estudios complementarios, servicio de urgencias, internaciones, etcétera.El secretario Palomo dice admirar el sistema de salud de Cuba cuyos logros son indiscutibles a nivel mundial.
Debería saber que Cuba construyó ese sistema garantizando el acceso a todas las otras necesidades de la población -el trabajo, la educación, un ambiente sano- cuestiones que están muy lejos de nuestro contexto, y no mencionarlas sería francamente faltar a la verdad.
Finalmente, Palomo denuncia que «los médicos» -ignorando las demás profesiones que intervienen en el sistema- vendemos «un producto a precios extraordinarios» a pesar de formarnos en universidades y hospitales públicos.
Queremos dejar en claro que no somos una corporación ni vendemos un producto. Somos trabajadores/as y lo que vendemos es nuestra fuerza de trabajo al municipio, a precios en muchísimos caso ínfimos, muchas/os de nuestras/os compañeras/os trabajan de forma precarizada, perfeccionamos nuestra práctica en cursos y congresos que pagamos con nuestros salarios y, aun así, garantizamos que el sistema que Palomo gestiona brinde respuestas a las necesidades de la comunidad.
A pesar de la intención de enfrentarnos con nuestros/as pacientes, reafirmamos nuestro objetivo de atender las necesidades de salud de las y los bahienses y de bregar por que sea en las mejores condiciones posibles.
Firmado: Dra. Andrea Mariño, PresidentaAsociación de Profesionales Municipales de la Salud Bahía Blanca y Dr. Pablo Curino, Secretario General Asociación Sindical de Profesionales de la Salud Municipal
