(Notas de Usuarios) – Debido a que el intendente de Bahía Blanca y el lobby empresarial del pavimento y la empresa Plaza vuelven a la carga con su plan de asfalto hasta el año 2028 y con cargo a los frentistas; voy a intentar defender mi bolsillo y el de varios frentistas más; ya que los Concejales andan muy tiernitos después de la última aplanadora electoral. El intendente y todos sus empresarios representados para este negocio, seguramente están acostumbrados a vivir con ingresos mayores a los $ 15.000 (concejales) y en ese microclima de ingresos de grupo de pertenencia creen que pueden aumentarle la tasa de ABL al vecino. Pero el vecino común y promedio no gana lo mismo que los ideólogos del “asfalto para todos y todas». Por otro lado, hay una pereza de imaginación en relación a la base imponible; es decir, ¿quiénes deberían pagar el asfalto y en qué proporciones? Aquí es donde empieza a asomar el título de esta nota: “La Tiranía del Automóvil”.
El auto tiene ciertas pretensiones históricas:
- Pretende ser barato, pagado en cuotas, accesible a todos.
- Pretende un buen asfalto para circular, pero que lo pague otro, no yo.
- Pretende Hospitales Públicos, Ambulancias, Policía gratuitos para atender a los conductores brutos como un arado que el Estado habilitó y atender a peatones víctimas de sicópatas con ruedas.
- Pretende que el Estado le mienta a su dueño y lo habilite como conductor con un carnecito.
- Puede fumar 30 atados de cigarrillos por cuadra, pero luego su dueño será un antitabáquico furibundo.
- Etc., etc., etc.(los conductores, en su afán de quitarse la responsabilidad, inventaron un asesino serial: “Esquinas Peligrosas”; ellos son los peligrosos.)
En cambio el frentista, o sea, el dueño de una casa que no tenga auto, tiene otras pretensiones:
- Tener la calle consolidada tan sólo para que soporte su peso al pisarla.
- Y gozar de que no vuele tierra en su cuadra.
El argumento de que los colectivos de Plaza y demás, se rompen por las calles de tierra, me cuesta creerlo porque desde que yo era chico han andado por tierra y andaban mejor que ahora.
Por lo tanto, lo que pretendo es hacerle entender a los concejales y a los lobbistas; que le cobren el asfalto a las patentes de estos tan privilegiados objetos rodantes, ya que ser dueño de un auto esconde gastos-costos que pagan otros; así cualquiera tiene auto y así estamos.
Una nota relacionada a lo anterior la pueden leer aquí.
Para quienes quieran descargar y leer un interesante libro de Roxana Kreimer, Licenciada en Filosofía y Doctora en Ciencias Sociales (ambos por la Universidad de Buenos Aires), pueden ir a los siguientes links:
http://www.filosofiaparalavida.com.ar/tiraniadelautomovil.htm
Descargar libro: http://www.filosofiaparalavida.com.ar/LibroAuto2006.pdf

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