(Notas de Usuarios) – En el artículo que sigue, publicado en España, notarán muchas similitudes con lo que pasa en Bahía Blanca. Y demuestra que aquí no sólo se hará un dragado: después vendrán muchas empresas y la ciudad pasará a llamarse Bahía Negra.
Eva y su serpiente coquetean con la manzana prohibida para desviar la atención del pecado original: los dragados portuarios
Nuestros abuelos disfrutaron de un paraíso natural en Salinas con dunas, pinos y abundante arena. El urbanismo salvaje, la industria y sobre todo los dragados en el Puerto de Avilés han ido destruyendo uno de los entornos más hermosos de la comarca. Entretanto nadie asume responsabilidades. Nuestra Eva local ofrece una manzana prohibida mientras Adán mordisquea el fruto ante la mirada maliciosa de una serpiente con lengua viperina. La tentación de Eva podría endeudar a todos los vecinos de la comarca…
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Seguramente la madre Naturaleza será la que ponga orden en el asunto y expulse a los intrusos del paraíso. Desde luego, por mi parte y tras leer el manifiesto de los ecologistas en defensa de las dunas, creo que no les falta razón y apoyo sus buenas intenciones. Aunque tal como está el patio, en mi humilde opinión la opción más sensata sería negociar con la constructora de las dunas, independientemente de que se declare la zona protegida, lo cual aplaudo a título personal. El Gobierno de Asturias ya descatalogó el terreno de la propiedad privada por decreto ley del parque natural de El Espartal, debido a los pleitos ganados ante el Tribunal Supremo. Seguramente las intenciones de los verdes sean justas y merecen ser apoyadas, sin embargo, el constructor exigirá una indemnización millonaria y el pleito continuará sufragado por los contribuyentes. Al final, los únicos que ganarán en el proceso serán los abogados. En ese tira y afloja un acuerdo es siempre mejor que un pleito, tal vez ofrecer otro terreno municipal distinto al del pinar, que sirviera de puente para llegar a un pacto. Pienso que sería lo razonable. Entretanto se desvía la atención hacia el pecado original de Salinas: LAS CONSECUENCIAS DE LA AMPLIACIÓN DEL PUERTO DE AVILÉS SIN ESTUDIOS DE IMPACTO AMBIENTAL DE LOS DRAGADOS. Ya nos hemos quedado sin playa en pleamar y la falta de arena se ha convertido en una enfermedad crónica.
De todas formas, me gustaría puntualizar que desde la plataforma “Salvemos la playa de Salinas” siempre se emitieron opiniones contra la construcción en las dunas. Hemos escrito artículos y entrevistas como la del oceanógrafo ecologista Tony Butt que explicó claramente que no se debe construir en terreno dunar. Asimismo nos unimos a la marcha verde el pasado 5 de junio, durante la celebración del Día Mundial del Medio Ambiente, en un recorrido donde comprobamos los elementos geológicos, botánicos y faunísticos de obligada protección legal. Otro asunto bien distinto es la forma para llegar a un acuerdo con los intereses privados con derechos adquiridos. Si de verdad se pretende que no se edifique en las dunas y zanjar el tema para siempre, se podría buscar un terreno como alternativa para ofrecer. ¿Por qué esa testarudez? Así las cosas, ante nuestros atónitos ojos “entre todos matan nuestra playa”, luego dirán que “ella sola se murió…”. Necesitamos un Adán que venza a las tentaciones de Eva y sepa apreciar las bellezas del paraíso. A modo de broma, dado el cachondeo municipal y la desidia hacia Salinas, esta debería ser la actitud hacia Eva …
Aunque los políticos locales y algún vecino despistado prefieren escuchar a Sabina: ”Olvídate del reloj nadie se ha muerto por ir sin dormir una vez al currelo porqué comerse un marrón cuando la vida se luce poniendo ante ti un caramelo. Anda deja que te desabroche un botón, que se come con piel la manzana prohibida y tal vez no tengamos más noches, y tal vez no seas tú, la mujer de mi vida”.
ROSARIO DI PAOLO
DIRIGENTE GREMIAL ATE
Solo Local 