El proyecto de instalación de una nueva sala de juegos en Mar del Plata choca con la oposición de un sector de los trabajadores de casinos de esa ciudad. Desde el sector gremial, surge como alternativa la apertura del bingo en otros sitios, entre los que figura Bahía Blanca. Así lo dice en esta nota, el secretario general de la Asociación Maestranza de Casinos quien deja bien claro que el motivo del rechazo es que no quiere competencia directa de otros juegos de azar en ese convocante lugar de la costa bonaerense. Por eso propone nuestra ciudad, junto a Junín y Ezeiza, como opción. No deben acordar con esta idea los propietarios del bingo bahiense que, en las últimas horas, ya habían acumulado dos buenos motivos de preocupación. Se trata de sendos proyectos elaborados por los bloques de Integración Ciudadana y Ocho de Setiembre del Concejo Deliberante. Uno de ellos, que puede consultarse haciendo clic en este enlace propone limitar su horario de funcionamiento. El otro, también de autoría de Raúl Woscoff y Elisa Quartucci puede consultarse aquí y apunta a subirle al bingo la tasa que abona por Seguridad e Higiene. Y por si fuera poco, se suma la Iglesia. Según publica la agencia católica de noticias AICA, en esta nota, en marzo se iniciará una campaña nacional sobre los riesgos de la adicción al juego. Literalmente, ¡Bingo!
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