Todo Sobre las Algas

El asqueroso olor y sabor del agua que sale por muchas canillas bahienses es un reflejo de los defectos en el proceso que lleva a cabo la Planta Potabilizadora Patagonia. La conclusión no es nueva. Un estudio académico realizado por investigadores de la Universidad Nacional de La Plata, determinó que una crisis similar, ocurrida hace más de 10 años, se debió a la baja eficiencia en el proceso de potabilización, tal como se lee al hacer clic aquí. En Bahía Blanca el problema no es nuevo. Eventos similares comenzaron a ocurrir en 1997, hasta que finalmente 3 años después y por orden judicial, se encomendaron varios estudios que detectaron alteraciones en la turbidez del agua y olor semejante a “Gamexane”. Según registró la investigación, ello coincidió con la aparición de problemas dérmicos y respiratorios en la población, (ver traducción del estudio en este enlace), información de la que poco se dijo por entonces, ya que apenas se mencionaron problemas gastrointestinales. Las conclusiones revelaban altas concentraciones de algas, más precisamente de la cyanobacteria conocida como Anabaena, así como de un compuesto denominado Geosmina, responsable del fuerte olor.  Durante la primera  crisis, el gobierno local responsabilizó a Azurix por el problema y ésta a su vez, al gobierno provincial.  En nuestros días el intendente Cristian Breitenstein tuvo que ingeniárselas para proteger a la administración de Daniel Scioli y  dijo que «esto no es una responsabilidad de ABSA provincial, donde están muy preocupados por lo que está pasando» y salió a cargar tintas sobre el gerente local (ver video aquí), como si ABSA Bahía Blanca tuviera independencia del estamento bonaerense.

El estudio de referencia se desarrolló en virtud de una solicitud de la Asesoría Pericial de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires, actuando en este caso como perito. Como consecuencia de estos trabajos se pudo verificar, en diferentes sectores de la red de distribución de agua potable de la ciudad de Bahía Blanca, que en el agua de red se hallaban presentes una gran cantidad de organismos pertenecientes al fitoplancton, varios de ellos pertenecientes al grupo de las Cyanobacteria toxigenas, Anabaena circinalis y Microcystis aeruginosa.

Asimismo, pudo hallarse al responsable de los olores y sabores desagradables presentes en el agua potable, ya que fue detectada, en altas concentraciones, un metabolito volátil, Geosmina. Este metabolito, no tóxico, es producido, entre otros organismos, por A. circinalis y tiene la característica de tener un olor semejante al insecticida organoclorado llamado “Gamexane”.

La información registrada fue presentada a las Unidades Funcionales de Instrucción del Departamento Judicial de Bahía Blanca, mediante tres informes parciales y uno final.