(Notas de Usuarios) – Tres años sin respuestas, tres años de manifestaciones, tres años de represión, tres años de impunidad. El cuatro de abril produjo el reencuentro de docentes, estudiantes, trabajadoras/es, obreras/os que se aglutinan detrás de las banderas que reclaman justicia para Carlos. Justicia para Carlos, pero también -y fundamentalmente- para todas/os las/os que salen a la calle a luchar por el cumplimiento de los derechos que les son suyos.
Estar en la calle, en el piquete, en el puente, en la ruta es el último recurso al que un/a luchador/a apela. Nadie llega a una ruta por el banal deseo de sentirse el/la más extremista. Cuando se llega a cortar, al piquete, es porque se han agotado todas las instancias de diálogo, porque se está dispuesta/o a todo. Las cosas no han cambiado mucho. Ayer, como hoy, las/os trabajadoras/es estatales siguen en la calle reclamando por un aumento proporcional a la inflación, por justicia por todas/os las/os desaparecidas/os, por las fábricas que se cierran por la especulación y negligencia de las patronales, por la salud y la educación. Hoy le sumamos un martir mas a nuestra lucha y es por eso que todos nos debemos sentir Carlos Fuentealba y Mariano Ferreyra.
Enviado a Solo Local por Rosario Di Paolo
