Juventud Peronista «Volvimos»

(Notas de Usuarios) – Los integrantes de la Juventud Peronista “Volvimos”, lanzada el último viernes en la ciudad de Bahía Blanca, con la presencia de jóvenes representantes de varios distritos de la Sexta Sección Electoral, recibimos con tristeza el comunicado de la autodenominada “Juventud del Partido Justicialista de Bahía Blanca”, publicado el domingo pasado en el diario La Nueva Provincia, misiva que pretende tener la intención de confrontar con nuestro grupo y descalificar a sus integrantes en forma pública, en modo gratuito e innecesario.Corresponde dejar en claro que para dar por descontada nuestra voluntad constructiva, el propio Santiago Mandolesi Burgos fue invitado en forma expresa y personal a asistir a nuestra presentación, sin que en el momento de formularse dicha invitación mediara por parte de él siquiera el menor indicio de objeción a nuestra iniciativa, algo que sí nos enteramos, exteriorizó luego a nuestras espaldas con vana suerte al intentar convencer a algunas personas de que nos disuadieran de la idea y no concurran al evento. Entre ellas se encuentra el doctor Víctor Benamo, presidente del Consejo del Partido Justicialista bahiense, quien sí honró nuestra presentación con su ilustre asistencia y mostró, en todo momento, una actitud de aliento y explícito apoyo a esta iniciativa.

Hecha esta aclaración, por haber sido aludidos con cierto sesgo despectivo, nos sentimos obligados a realizar otras consideraciones como para dejar en claro determinadas posiciones ante la ciudadanía.

En tal caso, como jóvenes en su totalidad y por consiguiente usuarios permanentes del sistema de transporte público de pasajeros, cuyo vergonzoso servicio complica la vida de miles de bahienses por responsabilidad directa de la ineficiencia municipal, nos preguntamos qué entienden los firmantes por “gestión por demás exitosa” a la hora de calificar la labor del actual intendente.

Nos llama también la atención el “enérgico repudio” a las pintadas (muy prolijas por cierto) en las que aparece el rostro de la presidenta de la Nación, proviniendo de quienes dicen apoyar a un intendente que llegó a su cargo como parte de la misma boleta electoral que consagró a Cristina Fernández de Kirchner como primera mandataria y que pudo concretar los mayores logros de su gestión a merced de los aportes provenientes del Gobierno tanto Nacional como Provincial, cuya defensa, divulgación de logros y proyectos aspiramos a contribuir con nuestro accionar, sin temor a que para ello haya que confrontar con quien sea necesario y desenmascarar hipocresías varias.
Nos preguntamos dónde estaban estos jóvenes autodenominados como “enmarcados en un pensamiento nacional y popular”, cuando en esta ciudad y en esta región arreciaban los ataques más virulentos al modelo nacional en medio del conflicto por los negocios agropecuarios de hace un par de años…

No se los oyó decir ni una palabra para defender las garantías constitucionales cuando tanto desde la intendencia como desde la presidencia del HCD se consideró que los jóvenes delincuentes no merecen una oportunidad de recuperación; pero claro, quizás su lealtad no se refleja en las enseñanzas de Perón o Evita o en el coraje de Néstor y Cristina Kirchner para poner de pie al país, sino con las cambiantes conveniencias de su jefe político, Dámaso Larraburu.

Tampoco se los vio dispuestos a la hora de defender la nueva Ley de Servicios Audiovisuales o expresar su apoyo al Matrimonio Igualitario, por mencionar dos logros recientes del Gobierno Nacional. Pero eso sí… qué aparezca el rostro de nuestra Presidenta en un muro de la ciudad es para ellos, algo “profundamente repudiable”, contradicciones que no podemos dejar de notar.

Quizás en estas diferencias para nada menores, radique la razón de la existencia de nuestro espacio, integrado en su totalidad por jóvenes con auténtica convicción, vocación y sentimiento peronista y no por “cazadores de cargos” que acomodan su idea conforme al sueldo que perciben.

Por último, nos preguntamos si en la convocatoria dirigida a “todos los jóvenes de bien” que deseen participar no habrá habido algún error de tipeo y en realidad quisieron referirse a todos los “jóvenes bien” de una ciudad, donde por caso los que tienen el privilegio de tener su propio automóvil (o el de sus padres), ni se enteran que a veces hay que esperar horas por un colectivo y por eso creen que pueden calificar a una gestión municipal como “poo r demás exitosa” sólporque a ellos les pagan su salario.