(Notas de Usuarios) – Con inusitada sorpresa escuché la noticia de la subasta de discos de vinilo, oportunamente donados para su preservación, que va a realizar la Biblioteca Rivadavia. Como hombre de radio que soy y ex – socio de la Institución ( renuncié por discrepancias con la actual administración ), me siento doblemente defraudado ya que parte del material acumulado en más de 40 años de profesión – alrededor de 1500 discos entre LP y simples – fue donado hace algún tiempo para la creación de una futura discoteca ( tengo entendido que LU2, luego de pasar a CD su música, hizo lo propio), a la que tendrían acceso los socios de la misma. Como la relación con la Administración de entonces era inmejorable – en mi caso – no creí necesario que se me extendiera ningún acuse de recibo ni remito, porque sabía que ese material, entregado en su momento al señor Gustavo Monacci, estaba bien depositado y sería archivado para su posterior uso. Comparto la opinión de otros donantes, en relación a que al menos debieron habernos consultado, ya que cuando entregamos toda esa reserva musical se hizo con la intención de conservarla y facilitar el acceso de cualquier persona asociada; pero de ninguna manera llevar a subasta pública ese patrimonio, que conservamos con todo cariño durante tanto tiempo.
Si no tenían espacio disponible, bien podría haberse entregado a cualquiera de los numerosos museos que posee la ciudad y no facilitar lo donado al mejor postor.

Debe estar conectado para enviar un comentario.