Mujeres que Esperan: Las Nuevas Obras de Anibal Nazzaro

obra_de_anibalAníbal Nazzaro es uno de los artistas más talentosos de Bahía Blanca. El año pasado expuso sus obras en ocasión del centenario del Barrio La Falda, tal como Solo Local reportó en diciembre de 2009, informando acerca del sitio Web en el que se visualiza una galería de sus pinturas, a la que se accede haciendo clic aquí. Ahora, Nazzaro nos vuelve a sorprender con una colección increíble: Mujeres que Esperan. «Gala esperando…«,  tal como se aprecia en este enlace. «Penélope esperando…«, como se visualiza mediante este link. «Gioconda esperando…», que puede visualizarse hacienco clic aquí.  En el artículo completo, el artista explica las razones que lo llevaron a poner su mirada en estas increíbles mujeres, por caso dos de ellas, la musa inspiradora del genial Dalí y Penélope: en La Odisea, Homero la obliga a esperar a Ulises, el más valiente de los combatientes en la guerra de Troya. Obras cargadas de simbolismos, vale la pena disfrutarlas.  Las últimas obras de Aníbal Nazzaro fueron publicadas en su blog, Arte y Parte, al que se accede haciendo clic aquí. La importancia del artista bahiense, que trascendió nuestras fronteras, tal como puede leerse en este enlace, en el que Nazzaro reflexiona: «Cuando algo produce una reacción en mí, allí está la inspiración.  Creo que todo el universo conspira para que me inspire.  Me inspire y diga con el arte, para que aquel que vea, tenga una sensación similar a la mía«, como se lee en español al final de su versión en inglés.

GALA IS WAITING, DALI (2010)

Esposa y musa de Salvador Dalí, Gala,  mujer misteriosa e intuitiva, reconoció  el genio artístico y creador, allí donde existía y a lo largo de su vida, se relacionó con numerosos intelectuales y artistas. En abril de 1929, el pintor viajó a París para la presentación de la película “Un chien andalou”, realizada juntamente con Luis Buñuel;  le presentaron a Paul Eluard, esposo de Gala. En el verano de ese mismo año, e invitados por Dalí,  Paul Eluard y Gala, con la hija de ambos, Cécile, viajan a Cadaqués para pasar una temporada. Cuando el pintor conoce a Gala, el enamoramiento es inmediato. En la Vida secreta escribe: “Estaba destinada a ser mi Gradiva (este nombre proviene del título de una novela de W. Jensen, cuyo personaje principal es Sigmund Freud; Gradiva es la heroína y lleva a cabo la cura psicológica del protagonista), la que avanza, mi victoria, mi esposa”. Gala ya no se separará del pintor. A partir de ese momento, su biografía va ligada a la de Dalí.

Fueron uno para el otro. Gala fue Dalí y Dalí fue Gala,  en una perfecta conjunción de arte-fama-placeres y dinero.

Dalí esperaba la fama por su arte y Gala esperaba los placeres que posibilita el dinero.
En 1948, Dalí y Gala vuelven de Estados Unidos después de ocho años de exilio.

Diez años más tarde,  se casan en el santuario de Els Àngles, cerca de Girona. En 1968, el pintor le compra a Gala un castillo en el pequeño pueblo de Púbol (provincia de Girona), al que él no puede acceder sin el permiso previo y por escrito de su esposa. Entre 1971 y 1980, Gala pasa algunas temporadas en su castillo, siempre en verano, esperando el delivery de placeres que le enviaba Dalí. Tras su muerte, en 1982, es enterrada allí. Desde el año 1996 el castillo está abierto al público como Casa-Museo Castillo Gala Dalí de Púbol.

 

PENÉLOPE IS WAITING, HOMERO (2010)

 

Estamos acostumbrados a las dicotomías y en este reparto de roles, “la espera” corresponde a las mujeres y su figura emblemática es Penélope. Homero, en La Odisea,  la obliga a esperar a Ulises, el más valiente de los combatientes en la guerra de Troya.

La relación del héroe con su familia es un trazo esencial en la historia. Su esposa Penélope, lo espera con una fidelidad ejemplar.

Teje su tela y sus engaños. Por su parte, Ulises se demora en exceso en la cueva de Polifemo para ver al monstruo, luego quiso escuchar los cantos de las Sirenas, se enredó en amoríos con Circe, quedó retenido ocho años en la idílica isla de Calipso, y se atrevió a navegar hasta la misma entrada del Hades. 

Vuelve veinte años más viejo.

Penélope planeó su vida resignada a esa ausencia, con sus propias ilusiones frustradas. Con el regreso del héroe al hogar no puede recuperarse el tiempo perdido y sí, en cambio, hay que buscar una sutura que se ha vuelto imposible después del largo vacío del tiempo.

Enlaces relacionados:

http://www.artreview.com/profile/anibalnazzaro

http://www.artreview.com/photo/photo/listForContributor?screenName=2hyb82p85ntej

 

 

 

 

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