Los habitantes de Bahía Blanca tienen una nueva posibilidad de extender su mano solidaria. Si quiere conocer cómo haga clic aquí, y sabrá más sobre una historia conmovedora, que un hombre decidió contar en un mail, que luego reenvió a sus contactos y que puede convertirse en una verdadera cadena de favores. Es la historia que une a Omar Staltari con Walter y su familia. Omar los conoció cuando Walter trabajaba para él. A partir de allí se involucró con su historia de vida, que incluía la vida a los 15 años en Buenos Aires y su posterior acercamiento a una iglesia Evangélica que lo ayudó a salir de la situación de calle, con todo lo que esto implica. Walter pudo revertir su designio y volvió a Bahía Blanca, su ciudad natal, donde formó una familia que hoy está compuesta por su señora y cinco hijos, de ocho meses, dos, cuatro, seis y siete años.
Cuando Omar lo conoció, Walter y su familia vivían en una casa por demás precaria, donde todos dormían en un mismo cuarto, con paredes de chapa y cartón. Fue así, que Omar pudo conseguirle un lugar donde vivir, en forma provisoria, pero mucho más digno que donde lo hacían anteriormente. Pero por diversos hoy deben dejar ese lugar, al que llegaron hace unos seis meses en calidad de préstamo. Una nueva posibilidad entonces de practicar la solidaridad.
