(Notas de Usuarios) – La clasificación del equipo de Diego Maradona pone fin a un ciclo. Fue uno de los más angustiantes. Un desencuentro tras otro; un leve éxito seguido de fracasos. Al fin las cosas se dieron a favor y Diego pudo salir abruptamente a apuntar a aquellos que procuraron degradarlo. Usó las expresiones más ordinarias para repetir lo que ya es propio del estilo presidencial: patotear; buscar contrarios y descargar ira. El «10» no asumió ser el DT del equipo de todos, y no, del de un sector. Maradona es admirable. Por su enorme generosidad, su talento y su voluntad. Es extremista. Cuentan sus compañeros del Campeón mundial 1986 que se adiestraba aparte. Que llevó a su propio preparador y hacía el doble de lo que todos los demás. Que estaba dispuesto a ser la gran figura de México 86. Y lo fue. También, con apenas 20 años se transformó en prócer napolitano llevando a su escuadra celeste al primer «scudetto» nacional. Pero cayó en el abuso de narcóticos y alucinógenos en una fiesta prolongada. Fue padre involuntario varias veces, en la maraña de ensueños y descontrol de esa etapa. Retirado, fue de la excesiva gordura a la delgadez más elegante. Amó y se peleó con amistades y circunstantes. Diego armó equivocadamente su selección para Sudáfrica. Hizo jugar a más de cuarenta estrellas en una decena de partidos. Abusó de nombres y capitales: ayer sacó al maravilloso Messi bastante antes del final.
El error fue entender que la selección puede ser una suma, sabiendo que es muy difícil sacar un resultado favorable si se adicionan individualidades sin una composición basada al menos en asociaciones estratégicas (defensores que se conocen, delanteros acostumbrados a acompañarse). El equipo nacional no pudo encontrarse a sí mismo. Sólo por momentos. Por suerte, alcanzó.Bolivia ganó como local a Brasil, Paraguay y Argentina, pero quedó afuera del mundial. Todos estos contrasentidos son producto de la desnaturalización que promueve la FIFA.
¿Qué significa que la Asociación del Fútbol Argentino, integrada por los clubes del país, sostenga un equipo formado principalmente por jugadores que pertenecen a entidades de otros continentes? ¿Por qué no reunir a los que están jugando en los clubes propios de la AFA?
Esa desvirtuación toca extremos cuando se elige a un DT de nacionalidad distinta a la del conjunto: Passarella con Uruguay, Lavolpe con México; Bielsa en Chile; Cappello en Inglaterra, etc., etc. Es como entregarle el ejército propio a un general extranjero. Es inaceptable.
En lo global, países pobres y dependientes fructifican en estrellas que van a lucirse a otros mercados. Es impensable retener a los cracks que cotidianamente afloran en las tierras débiles. Eso es materia de engorde de los especuladores de las finanzas.
Maradona asomó la cabeza sobre la línea de flotación de aguas turbias. Ahora tendrá que resolver si sigue, superar todas las presiones y diseñar la etapa de preparación para el Mundial.
Maradona asomó la cabeza sobre la línea de flotación de aguas turbias. Ahora tendrá que resolver si sigue, superar todas las presiones y diseñar la etapa de preparación para el Mundial.
Escrito por Julio Raitzin
civismodigital@hotmail.com
