Bahía Blanca y la Dictadura en Honduras

(Notas de Usuarios) – Sabemos qué es una dictadura. Lo sabemos en Argentina y lo saben los países hermanos del continente americano. La brutal interrupción del orden constitucional en Honduras, acompañado de persecusión, muerte, tortura y desaparición de personas, no ha generado la fuerte repulsa que el hecho merece. La correcta actitud del gobierno argentino en este tema, mancomundamente con los gobiernos de otros países hermanos,  posibilitó articular desde la OEA medidas tendientes al restablecimiento del orden constitucional, reponiendo en sus funciones al presidente Manuel Zelaya. Esta definición política no ha sido acompañada por el conjunto de los sectores políticos, sociales, económicos, ni por los medios de comunicación. La mayoría  ha omitido el tema o se lo ha mencionado como si fuese una cuestión de insignificante valor. Incluso la derecha más descarnada se ha mofado en programa televisivo de una exponente de ese sector bien conocido. Hoy se está analizando el tema porque se detiene a jóvenes que intentaron poner de manifiesto la atrocidad de la dictadura en Honduras. La valentía de estos jóvenes para alertar, evocar la memoria, y llamar a la resistencia de nuestros pueblos, es respondida con detenciones.  Se los quiere silenciar. Molesta que se hable de este algo sustancial para la vida de los pueblos libres. La policía que procede responde a un gobierno que teóricamente asume una actitud de condena al golpe de estado, lo que torna aún  más inaceptable este procedimiento. Nuevo Encuentro  Bahía Blanca repudia rotundamente las detenciones ilegales e inmorales, implicitamente convalidantes de una dictadura.

 

Reclama del gobierno nacional, provincial y municipal, un expreso pronunciamiento sobre este tema.  Se solidariza plenamente con los jóvenes de la Federación Juvenil Comunista que sufrieron el atropello, como con sus familiares, amigos y compañeros, rescatando su gesto valiente de salvar la dignidad de los pueblos y defender las propias convicciones. Es deseable que todos reclamemos juntos. Reclamemos por el orden constitucional en Honduras, por el derecho de los pueblos y por la defensa de dignidad humana, para que no haya perseguidos, masacrados, presos sin nombre, desaparecidos.
Salgamos acompañando el gesto  de estos jóvenes detenidos por manifestarse.
Pintar murales, enarbolar banderas, realizar marchas, convocar a asambleas, es el modo de no naturalizar el horror y el quiebre constitucional que, como en cascada, puede como la gangrena, invadir el cuerpo de los pueblos latinoamericanos.

Enviado por: Nuevo Encuentro, Bahía Blanca 20 de julio de 2009

 
Lea el comunicado de la Federación Juvenil Comunista sobre el incidente AQUI 
 
 

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