El asunto de la falsa candidatura de Federico Weyland, que SoloLocal trató aquí, parece ser una moda extendida en nuestros días. Y lo que cuestionamos a nivel local como legal, pero incorrecto, puede constituirse hasta en una defraudación. Los abogados constitucionalistas Gregorio Badeni y Félix Loñ coincidieron hoy en considerar que las candidaturas del gobernador Daniel Scioli y los intendentes del conurbano implican «una defraudación de la opinión pública», pese a que no hay impedimentos legales para que se presenten. Según Badeni, esas postulaciones pueden ser impugnadas ante la Justicia en caso de que los postulantes digan que van a renunciar a sus cargos legislativos si son electos. Badeni dijo que no hay inconveniente que alguien que esté ejerciendo un cargo se presente en las elecciones», pero sostuvo que «la autoridad electoral puede descalificar su candidatura. Además, consideró «incorrecto postularse» y manifestar que de ser electo renunciaría, porque implicaría «una burla a la voluntad popular». En tanto, el constitucionalista Félix Loñ aseguró que no hay ningún impedimento legal» para la estrategia kirchnerista, pero coincidió con su colega al señalar que «se está defraudando a la opinión pública si no se accede al cargo legislativo». Loñ afirmó que lo más ético sería renunciar al cargo actual y luego asumir el cargo legislativo para el que se presentarían, y calificó a la maniobra como «un fraude electoral». Según el abogado, la estrategia kirchnerista está impulsada por «un interés muy mezquino de que el ex presidente (Néstor Kirchner) se mantenga en el poder».
Ambos constitucionalistas también opinaron sobre las jugadas similares realizadas por la oposición, y coincidieron en criticar que el diputado Felipe Solá se postule cuando en realidad no necesita renovar su banca pues su mandato vence en 2011.
Badeni advirtió que Solá, candidato de la alianza entre el macrismo y el peronismo disidente, «no se podría presentar» en estas elecciones ya que su mandato vence en 2011, y consideró que sostener que alguien se presenta para «revalidar» su lugar, es un argumento «pueril».
Por su parte, Loñ consideró que Solá debería renunciar antes de presentarse como candidato porque la Constitución prevé la reelección una vez que termina el mandato.
En cuanto a la vicejefa de Gobierno porteño, Gabriela Michetti, quien será candidata a diputada nacional del macrismo, Loñ dijo que es un caso distinto porque «existe la certeza de que se va a presentar como candidata, pero va a asumir el cargo legislativo» en caso de ganar. Para Loñ, toda la situación electoral actual se basa en «una falta de ética política, plagada de maniobras burdas» dignas de «una republiqueta».
Ambos constitucionalistas también opinaron sobre las jugadas similares realizadas por la oposición, y coincidieron en criticar que el diputado Felipe Solá se postule cuando en realidad no necesita renovar su banca pues su mandato vence en 2011.
Badeni advirtió que Solá, candidato de la alianza entre el macrismo y el peronismo disidente, «no se podría presentar» en estas elecciones ya que su mandato vence en 2011, y consideró que sostener que alguien se presenta para «revalidar» su lugar, es un argumento «pueril».
Por su parte, Loñ consideró que Solá debería renunciar antes de presentarse como candidato porque la Constitución prevé la reelección una vez que termina el mandato.
En cuanto a la vicejefa de Gobierno porteño, Gabriela Michetti, quien será candidata a diputada nacional del macrismo, Loñ dijo que es un caso distinto porque «existe la certeza de que se va a presentar como candidata, pero va a asumir el cargo legislativo» en caso de ganar. Para Loñ, toda la situación electoral actual se basa en «una falta de ética política, plagada de maniobras burdas» dignas de «una republiqueta».
Pero la iniciativa política, en caso de concretarse, puede ocasionar un verdadero descalabro institucional. Según el diario «Hoy», si candidatura de Scioli finalmente se efectiviza, se abrirían dos alternativas: la primera es que el mandatario provincial resulte electo y no asuma su banca para continuar en el sillón de calle 6, con lo cual se estaría violando el mandato popular de las urnas. A su vez, si efectivamente asume su lugar en el congreso nacional, esa situación podría ser un revés político para el gobernador, ya que estaría dejando su cargo al promediar su gestión, teniendo que asumir la conducción de la Provincia el vice Alberto Balestrini.
