Grupo Plaza en Bahía Blanca: Empezó Mal

(Editorial) – Las cosas no comenzaron bien para los miles de bahienses que diariamente deben subirse a un colectivo. Falta de información, recorridos defectuosos, barrios aislados y frecuencias escasas, sellaron el inicio del nuevo sistema de Transporte de Pasajeros en Bahía Blanca. Todas las miradas apuntan al municipio, que terminó por concederle la mayor parte de las líneas al Grupo Plaza, una de las empresas de transporte más beneficiadas por los subsidios del matrimonio Kirchner. Solamente en Bahía Blanca, la empresa recibió en julio pasado 103.000 litros de gasoil, según datos de la Comisión de Regulación del Transporte. El ente, que es autoridad de control en la materia, reporta más de 1.000 quejas de pasajeros. Básicamente, por incumplimiento en las frecuencias y por no respetar las paradas. En los últimos meses también aumentaron las denuncias por aumentos en el precio del pasaje, maltratos de los choferes y por prestar “servicios no habilitados”. Pero, parece que estos antecedentes no importan. Al menos no importaron al momento de otorgarle la licitación. Las sospechas del ciudadano común no son infundadas: en la década de los ‘90, los hermanos Mario y Sergio Claudio Cirigliano (dueños del Grupo Plaza), eran propietarios de sólo 2 líneas de colectivos (la 61 y 62 de Capital Federal). Hoy controlan un impresionante tejido de redes urbanas y suburbanas, valuado en millones. Y siempre quieren más. Según reportó el diario «Hoy», de La Plata, parece que la ayuda de los subsidios estatales no les alcanza: el servicio que une La Plata con Capital Federal aumentó de 6,50 a 8,50 pesos. Esto representa un aumento porcentual de casi el 31 %. En Bahía Blanca, andamos cerca, el incremento porcentual será del 25 %. Mientras el intendente Cristian Breitenstein sigue insistiendo en su teoría de que tendremos un servicio de primer nivel, las denuncias en otros puntos del país, registradas por la CNRT, dicen otra cosa: que las unidades no están bien equipadas, que hay pocas frecuencias y que los pasajeros deben viajar apilados. Lejos de ese escenario pero cerca de esa realidad, el enojo popular bahiense, por los nuevos recorridos, se hace sentir en al menos 14 barrios, sin que el intendente Cristian Breitenstein haya decidido dirigirse a la población, para dar al menos, una sola respuesta.

Los comentarios están cerrados.

Crea una web o blog en WordPress.com

Subir ↑